
Desde los espectáculos del Super Bowl hasta los viajes por carretera de influencers, las campañas de pickups en 2024–2025 están apostando por la libertad y la aventura como su promesa central. Las marcas están combinando impresionantes vistas del desierto, caminos de montaña y campings en la playa con camionetas que se presentan como pasaportes para una vida vivida al margen del reloj. El mensaje abarca modelos de gasolina, híbridos y eléctricos, vinculando la capacidad con la autosuficiencia: arrastra los juguetes, alimenta el camping, escapa de la rutina. Es una narrativa que resuena tanto con los exploradores de fin de semana como con los propietarios trabajadores, y cada vez más se apoya en accesorios de fábrica y versiones todoterreno que hacen que la fantasía sea alcanzable.
Las marcas de automóviles han vendido pickups durante mucho tiempo utilizando el lenguaje de la resistencia y la independencia, pero ahora las imágenes han cambiado de la dureza del trabajo en el campo a la aventura cinematográfica. Imágenes aéreas siguen las crestas de las montañas, las tiendas de techo se despliegan al atardecer, y las puertas traseras se convierten en cocinas de campamento mientras las voces en off prometen un espacio para explorar. Lemas como “Vamos a lugares”, “Encuentra nuevos caminos” y “Construido para servir” ahora se enfocan en la exploración sin dejar de lado el trabajo. El gancho práctico es que estas camionetas son vehículos para el día a día, con publicidad diseñada para que una escapada espontánea no solo sea posible, sino también sencilla.
Las colaboraciones con productos hacen que la propuesta sea más tangible. El Tacoma Trailhunter de Toyota, los paquetes ZR2 Bison de Chevy, el AT4X de GMC, el Raptor y Tremor de Ford, el Rebel de Ram, y el PRO-4X de Nissan se promocionan con protectores de chasis, bloqueos y rieles de accesorios que reflejan las escenas de la publicidad en la naturaleza. Las colaboraciones con marcas de off-road como AEV y ARB aparecen tanto en la pantalla como en la lista de pedidos, reduciendo la incertidumbre del mercado secundario. Los concesionarios informan que las versiones centradas en la aventura atraen a compradores que de otra manera optarían por crossovers, atraídos por la promesa de capacidad junto con equipo especializado.
Las pickups electrificadas están adoptando la misma narrativa de libertad con un giro moderno. Los anuncios de la F-150 Lightning de Ford destacan el Pro Power Onboard para alimentar herramientas o campamentos, reformulando la electricidad como autosuficiencia. El mensaje de Rivian gira en torno a la responsabilidad y la exploración, mientras que el Hummer EV de GMC se apoya en la tecnología de sendero y el torque silencioso para conquistar terrenos. Las campañas cada vez más combinan imágenes de aventura con señales de responsabilidad—etiqueta de sendero, asociaciones de conservación y eficiencia—posicionando las motorizaciones más ecológicas como compatibles con el ideal de aventura en la naturaleza.
El motor narrativo ahora funciona tanto en redes sociales como en televisión. Las marcas siembran camionetas con creadores de contenido de overlanding, patrocinan limpiezas de senderos y carreras en el desierto, y organizan días de demostración que enseñan a recuperar vehículos y a desinflar neumáticos. Los clips generados por los usuarios de tablas de surf en las cajas y bicicletas en las puertas traseras extienden la compra publicitaria de forma gratuita, manteniendo las pickups deseables tanto en ciudades como en pueblos pequeños. El efecto práctico es una atracción hacia versiones de estilo de vida y paquetes de accesorios, que generan margen para los fabricantes y un kit de aventura listo para los propietarios.
Se espera que las campañas de 2025 sigan combinando mito y utilidad—libertad enmarcada por tecnología de seguridad, mejor economía, y equipo que hace la escapada más simple.