
Realizamos recorridos controlados en ciudad, carretera y rutas mixtas con un Toyota RAV4 Hybrid AWD 2024 para comprobar cómo sus calificaciones de la EPA se traducen en economía de combustible en la vida real, con mediciones de borde a borde que verifican el ordenador de a bordo.
Prueba del coche: RAV4 Hybrid XLE AWD 2024 con llantas de 18 pulgadas, motor de cuatro cilindros Atkinson de 2.5 litros con dos motores-generadores en la parte delantera y uno en el eje trasero (e-AWD), eCVT, potencia total del sistema de 219 hp. El peso en vacío es de aproximadamente 3,750 lb, y el tanque de combustible tiene capacidad para 14.5 galones. La economía de combustible según la EPA es de 41 mpg en ciudad, 38 mpg en carretera y 40 mpg combinados. Condiciones y método: Odómetro en 6,200 millas.
Temperatura ambiente 68–74°F, viento ligero del NW de 5–9 mph, altitud de 520–760 pies. Los neumáticos eran Bridgestone Ecopia H/L 422 Plus (225/60R18) inflados a 35 psi según la etiqueta en frío. Gasolina E10 regular (87 AKI). Dos adultos más ~50 lb de equipaje (≈360 lb de carga).
Usamos la misma bomba en ambas ocasiones, llenando hasta el primer clic más una pausa de 3 segundos, de borde a borde. Se reiniciaron el viaje, la velocidad promedio y el aire acondicionado; las distancias se verificaron con GPS. Ruta urbana: 37.2 millas con 22 semáforos y tráfico moderado, velocidad promedio de 24 mph. Ruta en carretera: 50.1 millas de ida y vuelta a 70 mph (68 mph según GPS), clima a 72°F en modo automático.
Ruta mixta: 120.4 millas (60% carretera, 40% urbano). Resultados en ciudad: La computadora de a bordo indicó 45.2 mpg; calculando en la bomba medimos 44.0 mpg (0.85 galones usados), superando la cifra de 41 mpg de la EPA en ciudad. El uso frecuente de la función de rodaje con el motor apagado y un frenado regenerativo agresivo en modo Eco ayudaron, y la transición entre propulsión eléctrica y de gasolina fue prácticamente imperceptible. Acelerando suavemente y anticipando semáforos mantuvieron el motor funcionando entre 1,200–2,000 rpm cuando estaba en marcha.
Resultados en carretera: La computadora de a bordo marcó 37.8 mpg; calculamos que vimos 36.9 mpg (1.36 galones en 50.1 millas), ligeramente por debajo de la calificación de 38 mpg de la EPA en carretera. Un leve viento cruzado y la velocidad constante de 70 mph afectaron la eficiencia del sistema híbrido. La velocidad del motor se mantuvo alrededor de 1,800–2,200 rpm en terreno llano; pendientes suaves provocaron breves aumentos a ~2,500 rpm, pero el ruido en la cabina se mantuvo contenido. Resultados de la ruta mixta: En 120.4 millas, la computadora de a bordo mostró 40.9 mpg; de borde a borde resultó en 40.2 mpg, prácticamente igualando la calificación combinada de 40 mpg de la EPA.
El medidor y el estimador de rango fueron conservadores, encendiéndose la luz de bajo combustible con aproximadamente 2.0–2.5 galones restantes, lo que implica un rango realista de 470–520 millas dependiendo de la mezcla de rutas. A lo largo de todos los recorridos, la computadora de a bordo mostró un optimismo de alrededor del 2% en comparación con los datos de la bomba. Conclusiones: A velocidades urbanas, el RAV4 Hybrid puede superar las cifras de la EPA; a 70 mph reales tiende a ser un poco más bajo que la calificación en carretera, y la conducción mixta se ajusta a la cifra. Para igualar los resultados de la EPA en carretera, apunta a 65 mph, mantén los neumáticos en especificaciones, usa el modo Eco en el tráfico y evita los portaequipajes o cargas pesadas.
La consistencia del RAV4 Hybrid, su asistencia eléctrica utilizable y sus bajos costos operativos lo convierten en una opción fácil para los compradores que buscan eficiencia y que pasan tiempo tanto en la ciudad como en la carretera.