
Pasamos poco más de cinco meses y 5,200 millas con un Mazda CX-5 Premium AWD 2024 para evaluar el desgaste real en las superficies que tocas a diario. Aquí te contamos cómo han resistido los refuerzos de los asientos, el volante, los acabados en negro piano y los interruptores.
Nuestro coche de prueba fue un Mazda CX-5 Premium AWD 2024 con un motor de cuatro cilindros en línea de 2.5 litros (187 hp, 186 lb-ft) y una transmisión automática de seis velocidades. Su peso es de aproximadamente 3,800 libras, montado sobre ruedas de 19 pulgadas con llantas para todas las estaciones. La versión Premium incluye asientos de cuero, un volante de cuero calefaccionado, y una consola central negra brillante alrededor de la palanca de cambios y el control Commander. Las pruebas incluyeron desplazamientos diarios, dos viajes por carretera de 300 millas, un par de recorridos por la montaña y rutas escolares habituales.
El coche transportó a dos adultos y dos niños, además de una silla de auto orientada hacia atrás. Las temperaturas variaron de 45 a 92 grados Fahrenheit, con varias semanas de lluvia. La limpieza del interior se mantuvo realista: aspirado cada dos semanas, limpieza semanal con un paño de microfibra húmedo, y un limpiador de cuero neutro en pH usado dos veces durante el periodo de prueba. Soportes de los asientos: el refuerzo exterior del asiento del conductor muestra ligeras arrugas y un leve aplanamiento donde los muslos deslizan al entrar.
No se observaron grietas ni transferencia de tinte, y la costura se mantiene firme sin deshilachados. El soporte de espuma se siente como nuevo, y la retención de la forma lateral es buena tras aproximadamente 1,500 ciclos de entrada/salida. El asiento del pasajero, en comparación, se ve casi como nuevo. Consejo: bajar un poco el asiento y girar en vez de deslizarse reduce la formación de nuevas arrugas en el último mes.
Volante: El cuero ha desarrollado un ligero brillo en las posiciones de 9 y 3, y una zona más suave en 10 a 2, lo cual es esperado para este kilometraje. No hay peladuras en las uniones de los radios, ni levantamiento en las secciones calefaccionadas, y la costura está al ras sin hilos sueltos. El bloqueador solar y la loción para manos aceleraron el brillo después de los días de playa; un rápido paño con microfibra húmeda eliminó los residuos y restauró un acabado mate más uniforme. La tapa del logo de Mazda y la cubierta del airbag no muestran marcas, y los botones en el volante se activan con un clic consistente y sin juego.
Detalles en piano negro y botones: La consola brillante alrededor de la palanca de cambios y el pomo del Commander es la única área que muestra un desgaste notable. Incluso con microfibra, aparecieron pequeñas marcas y algunos arañazos en línea recta durante el primer mes; después de seis meses, son visibles a la luz directa del sol, pero fáciles de ignorar a la sombra. La acumulación de polvo es frecuente y las huellas dactilares son evidentes. Los interruptores de las ventanas, los controles rotativos del HVAC y las palancas se sienten sólidos con retroiluminación constante e íconos claros; no hay desgaste de pintura en los pictogramas.
El anillo estriado del pomo del Commander resiste el desgaste del pulido y aún gira con un clic preciso. Los tiradores de las puertas muestran un ligero pulido pero sin decoloración. En general, los puntos de contacto del CX-5 envejecen con gracia: las superficies de cuero se mantienen bien, los interruptores siguen firmes, y la principal vulnerabilidad es la consola en piano negro, que se raya fácilmente. Si eres sensible a los microarañazos, considera una película protectora mate o elegir una versión con menos brillo negro.
Una limpieza suave rutinaria y un acceso cuidadoso a los asientos minimizan el desgaste. Después de 3 a 6 meses, todo se presenta como de alta calidad y consistente con la reputación de Mazda por interiores duraderos.